Leyendo el periódico he encontrado este artículo titulado "Analfabetos sexuales" en el que nos describen algunas iniciativas de acercamiento al erotismo, tales como cursos, locales, museos o incluso parques temáticos donde la sexualidad es protagonista.
Se nos tacha en dicho artículo de estar, en España, muy lejos aún de asumir con total naturalidad nuestra sexualidad y muy distantes a la manera de enfocar el erotismo que tienen otros países europeos (cosa que habría que analizar más profundamente, porque creo que no cojeamos de este pie sólo aquí). Falta educación en este sentido, dice el artículo. En mi opinión, falta educación en este y en muchos otros sentidos, pero es innegable que en el ámbito sexual hay serias carencias educativas.
Sin embargo, creo que un ambiente represivo, como el que se ha vivido durante mucho tiempo en España, no está exento de erotismo. El erotismo puede desarrollarse también como una forma sutil de hablar de sexo cuando no nos está permitido hacerlo abiertamente. Otra cosa es que este tipo de erotismo encubierto no sirva de nada a la hora de enfocar nuestra sexualidad en la intimidad, de la misma manera que tampoco ayuda mucho intentar aprender sobre el sexo a través de la pornografía.
Eso no quita que el erotismo pueda ser muy interesante cuando nos acercamos a su vertiente artística (vertiente de la cual la pornografía anda más cortita) pues se convierte entonces en un estupendo motivo para la pintura, la escultura, la literatura o la fotografía. Y cuando el artículo se refiere a este tipo de erotismo, sí que coincido con él en que nos falta sobre todo, oferta erótica, y en que no nos mostramos del todo abiertos ante ella.
El problema quizás es que confundimos sexualidad con erotismo (y erotismo con pornografía). Incluso este artículo creo que lo confunde.
En mi opinión la sexualidad es algo diferente del erotismo, si bien es cierto que puede que nos falte educación para comprender tanto lo uno como lo otro.
La sexualidad es algo ligado a nuestra propia naturaleza, relacionada con nuestros instintos y que pertenece a un ámbito más íntimo o privado (bueno, todo lo privado que queramos que sea, claro está). El erotismo es una manera de hablar sobre sexo: una forma de expresión artística, y por lo tanto más abierta y pública, relacionada con la sexualidad.
Así es al menos como lo comprendo yo, que como la mayoría, no he recibido nunca ningún tipo de educación sexual.
